El descenso, a un suspiro

El Valencia está roto. No funcionan las bolas de partido que el entrenador manda a sus futbolistas, como se demostró en Anoeta. A los blanquinegros se les ha olvidado ganar, cada vez les cuesta más generar una pizca de fútbol para mantenerse con algo de vida en los encuentros y aguantar los combates con los rivales de turno. El equipo padece todos los problemas del mundo y psicológicamente aún puede ser peor, porque hoy -y hasta el nueve de enero, como mínimo- puede ser uno de los tres peores equipos de la Liga. Hoy el Valencia puede caer a la zona de descenso.

Van a depender los de Cesare Prandelli del resultado que el Sporting coseche ante el Espanyol de Quique Sánchez Flores. No es fácil ganar en Barcelona, pero al Sporting le vale un empate para escapar de esas plazas y meter al Valencia en el puesto 18, donde pasaría toda la Navidad. Después de ver la actuación que los blanquinegros cuajaron ayer en Anoeta, es difícil pensar que sería mejor verle las caras al Real Madrid el próximo fin de semana. Pero el duelo contra los blancos tendrá que esperar por el Mundial de Clubes. Va a disponer de tiempo Prandelli para reflexionar, como dijo ayer, y reunirse con la propiedad para evaluar los daños de la plantilla antes de jugar el próximo partido de Liga: ante Osasuna el nueve de enero.

El Valencia va a pasar un mes con doce puntos en quince jornadas (números de descenso) y dependiendo de los de abajo la clasificación -sobre todo a nivel mental- será más dañina para los blanquinegros. Si hoy el Valencia se puede meter en descenso, el próximo fin de semana hay otra posibilidad puesto que el Sporting de Gijón juega en casa contra el Villarreal. Esa será la segunda ocasión de los rojiblancos para adelantar al Valencia. El Granada (nueve puntos) puede igualar a los de Prandelli si en la siguiente jornada vence a la Real Sociedad en el Nuevo Los Cármenes.

Un triunfo en ocho partidos

Prandelli consiguió la victoria en Gijón en su debut con el Valencia (1-2) y desde entonces no ha vuelto a ganar en Liga. El italiano ha dirigido a los blanquinegros en ocho encuentros con un balance de un triunfo, tres empates y cuatro derrotas. Yendo al principio de Liga, el Valencia igualó ayer el peor inicio de su historia, con tres victorias, tres empates y nueve derrotas que sólo tienen dos precedentes en la historia del club (82-83 y (97-98).