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Mario Suárez y Parejo, en el túnel de vestuarios de Mestalla. :: jesús signes
A las puertas del infierno

A las puertas del infierno

El equipo sigue falto de consistencia física y mental, por eso doce de los 26 tantos que lleva en contra los recibe al final de la primera parte y del partido

JUAN CARLOS VALLDECABRES

Martes, 6 de diciembre 2016, 00:09

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valencia. Enzo Pérez lleva dos temporadas y media de fútbol -discreto- en el Valencia y es ahora el capitán, pero ha demostrado no conocer con certeza la capacidad autodestructiva de esta plantilla. Cuando pronosticó tras empatar contra el colista en Mestalla que el Valencia «había tocado fondo», no podía imaginar el argentino que este equipo todavía lo iba a complicar más, demostrando que padece un mal que le va a condenar estas Navidades a estar al borde del infierno y, quién sabe, si inmerso en él. Para el Valencia, 2016 se va a terminar en lo que a la Liga se refiere este próximo sábado en Anoeta. Jugar contra la Real Sociedad el último partido del año -sólo ha perdido un encuentro como local-supone el primero de los dos serios condicionantes para los de Prandelli. El segundo hándicap está en el hecho de tener aplazado el partido contra el Real Madrid. De cara al parón, resultará muy duro y aun sabiendo que el Valencia tiene una jornada menos, ver qué posición luce el equipo y qué mísera cifra de puntos acompaña a los turrones.

Y si había alguna forma de ensuciar todavía más este final de año, el resultado anoche del último partido que cerraba esta jornada 14 no ayudó nada. El Deportivo, que con 10 puntos ocupaba la plaza 18 y por lo tanto un puesto de descenso junto a Granada y Osasuna, vapuleó, contra todo pronóstico en Riazor, precisamente al próximo rival de los blanquinegros -la Real Sociedad- (5-1) y modifica sustancialmente la zona de peligro. El Dépor adelanta ahora tres posiciones y supera en la tabla tanto al Sporting (12 puntos) como al Valencia (también con esos 12). Por suerte, es el Sporting el equipo que cae en descenso, salvándose el equipo de Prandelli únicamente por la diferencia de goles (-7) que hoy en día tiene con respecto a los asturianos (-13). Esa es la realidad. Sólo ese matiz de los goles le evita caer al barro de donde no fue capaz de sacarlo Ayestarán.

Ayer, en la sesión de entrenamiento de Paterna, muchas caras largas como no podía ser de otra manera. Por desgracia, viene siendo lo habitual. La presencia de Layhoon a pie de campo contribuyó de alguna manera a dar la justa trascendencia a la dinámica tan negativa en la que se ha metido el grupo. La presidenta se pasó toda la mañana en la Ciudad Deportiva, saludó uno a uno a los futbolistas cuando se retiraban a la ducha y mantuvo un diálogo con el entrenador. Le está tocando vivir a Prandelli una situación que el propio italiano no se podía imaginar cuando firmó, con el añadido de que ahora también es él el señalado.

Porque, a decir verdad, tampoco se imaginaba la grada de Mestalla que hasta Prandelli acabaría contagiándose del amargo 'tufillo' que empieza a despedir el equipo. Este domingo, el italiano fue superado tácticamente por Juande Ramos. Con sus decisiones, Prandelli no solo no pudo mejorar la situación de los suyos sino que empeoró el panorama de manera sustancial.

Lleva justo dos meses aquí y el entrenador no ha cumplido ninguno de los preceptos que anunció. «Lo que tengo que hacer es mejorar los jugadores que tengo ahora», dijo el día de su presentación, donde también comentó aquello de que su deseo era «hacer un equipo compacto con dos o tres ideas claras». Ni ha mejorado las prestaciones de los futbolistas ni el equipo es compacto y ni tan siquiera funcionan esas pocas ideas que quiere implantar.

Cuando parecía que el 4-2-3-1 se iba a convertir en el dibujo de cabecera y que tanto se había resistido Ayestarán a poner en marcha, Prandelli tuvo que cambiar y apostar por el 5-3-2 para intentar que alguna vez se termine de cerrar la portería. Ni aún así lo consigue. Los tres centrales teóricamente deberían dar esa fortaleza, sobre todo por los avales que traen. Pero Garay, por ejemplo, no ha demostrado todavía que es un fichaje de 22 millones. Contra el Málaga, se hartó de despejar balones a la banda a las primeras de cambio en un claro síntoma de falta de confianza. Si el que tiene que aportar algo de criterio actúa así...

Hay un dato, además, que deja en evidencia el sistema defensivo y de manera particular a los centrales (los tres titulares con 1,88 m. de altura). El Valencia es el segundo equipo de Primera que más goles recibe de cabeza (9), sólo superado en este nefasto ranking por el colista Osasuna (11). Es decir, no sólo es el Valencia el que más goles recibe como local (16) de la Primera División

Apuntó hace un par de semanas Prandelli que el Valencia padecía un problema psicológico. Y tiene parte de razón. Pero el fallo mental le provoca un fallo también en las piernas. La segunda parte contra el Málaga fue un reflejo de la incapacidad general -incluido el entrenador- para cortar el crecimiento del rival.

El Valencia se está caracterizando por descomponerse ya la flojera es patente en cada final de partido. Lo que hizo Fornals para darle un punto al Málaga en la prolongación, lo hicieron también Marko para Las Palmas (87'); Rubén Castro en el 2-3 del Betis en Mestalla (89'), Gameiro para el 0-2 del Atlético de Madrid (89') y Messi en aquel polémico Valencia-Barça (2-3 en el 89').

El final de los primeros tiempos también son proclives a que el Valencia encaje: Rubén Castro (37'), Aduriz (41'), Toquero (Alavés, 44'), Carlos Castro (Sporting, 40'), Emre (Deportivo, 45'), Roncaglia (Celta, 43') y Mehdi (Granada, 45'). Doce de los 26 goles (casi la mitad) que lleva en contra el Valencia llegan en los últimos minutos.

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