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T. CALERO
Sábado, 23 de julio 2016, 00:08
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Primero fue Rodrigo Moreno y ahora Santi Mina (Vigo, 1995). Los futbolistas del Valencia han utilizado el verano, entre otras cosas, para repasar los pecados de un año para olvidar y volver a los entrenamientos dispuestos a devolver al conjunto blanquinegro de dónde no debió salir.
Parece que todos han hecho autocrítica después de rozar el descenso la pasada temporada...
Sí, es normal. Sabemos de la grandeza del Valencia, que siempre tiene que pelear por todas las competiciones y el año pasado estuvimos peleando por no descender. Todo el mundo era consciente de lo mal que lo estábamos haciendo. Tenemos que pensar que está en nuestra mano arreglar todo lo que hicimos mal el año pasado. Estamos contentos de cómo estamos trabajando y hay buenas expectativas.
¿Hay diferencias de lo que pide Pako Ayestarán respecto a la temporada anterior?
Sí, sobre todo el aspecto físico no lo tocamos porque era ya mitad de Liga hacia adelante y no podíamos trabajarlo mucho. En cuanto a lo táctico, el año pasado era más general para llegar al partido y ahora estamos repasando errores y puliendo detalles desde el principio.
Y usted, ¿cómo afronta su segunda temporada en el club?
Me encuentro mucho más cómodo y como soy yo realmente: alegre, feliz, con ganas de transmitir esa alegría a todo el mundo y entre todos vamos a hacer un gran año, de eso estoy seguro.
El año pasado fue de menos a más, ¿cuándo se dio el cambio?
Al principio no me sentía cómodo ni como yo era en Vigo. Me costó un montón. Con la ayuda del club y mis compañeros me fui integrando, tenía ganas de ir a entrenar. Al principio no es que no tuviera ganas de ir, pero no estaba en mi hábitat y me costó más. Ahora estoy feliz en el Valencia y espero quedarme muchos años.
Pasó por algunos problemas con la alimentación...
Era el primer año que salía de casa y al principio, cuando llegaba de entrenar solo, no sabía ni cocinar. Comía lo primero que pillaba y lo noté porque la primera parte de la temporada no estaba rápido. Con la ayuda de los doctores mejoré y ya me encontraba más cómodo.
¿El cuerpo técnico insiste mucho en ese tema?
Sí, y notamos ese cambio porque dentro del campo se percibe. El míster está centrado en eso y nos puede ayudar mucho. El año pasado jugábamos un miércoles y el sábado no íbamos cara al aire.
¿Qué significó para usted que el club le eligiera como imagen junto a Gayà y Paco Alcácer?
Un orgullo. Que este sea mi segundo año y el Valencia me trate así... El cariño que me dan con 20 años y que me pongan con dos referentes de la casa es un orgullo.
¿El dinero que costó -10 millones- también fue un hándicap?
Todo el dinero que se pagó por mí, con 19 años, la verdad es que sí me pesó un poco. El día que marqué el primer gol contra el Barça en Mestalla fue un alivio. Me solté y desde ahí fui creciendo.
La afición del Valencia exige pero a usted ya le ha cogido cariño.
Exige porque este club es grande y se espera mucho de nosotros. El año pasado no dimos la talla.
¿Qué objetivo personal se marca para esta temporada?
Espero y creo que voy a superar los goles del año pasado. Quiero ayudar al equipo y si tengo que dar 80 goles los daré para que el equipo vaya hacia arriba.
¿Cuántas veces ha visto repetido su gol en el Camp Nou?
Lo he visto repetido varias veces, no sólo el gol, también la jugada porque hicimos muchos pases. Es el Valencia que se tiene que ver este año, que lleve la iniciativa y que en Mestalla sea muchísimo más fuerte que el año pasado.
¿Qué opina de Nani y Medrán?
Nani lleva una carrera espectacular, es un espejo en el que mirarme. Y con Álvaro coincidí en la selección y tiene unas condiciones estupendas. Nos van a ayudar mucho.
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