Borrar
Urgente Bertín Osborne y Taburete, entre los artistas de los Conciertos de Viveros 2024
Fran Villaba presiona ayer a un rival.
Zahibo y Diallo exhiben su poderío físico; Fran Villalba, la clase del partido
fútbol | valencia cf

Zahibo y Diallo exhiben su poderío físico; Fran Villalba, la clase del partido

El técnico aprovecha el cómodo encuentro de vuelta para dar protagonismo a los tres canteranos incluidos en la convocatoria

Toni Calero

Jueves, 17 de diciembre 2015, 00:14

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Han estado en los pensamientos de los técnicos desde el verano y ayer, por fin, pudieron cumplir su sueño de debutar con el primer equipo. El encuentro de Copa fue el momento idóneo para que Gary Neville decidiera dar protagonismo a tres jugadores del filial: Wilfried Zahibo, Fran Villalba e Ibrahim Diallo. Todos ellos, además, cumplieron con nota en sus primeros minutos con los 'mayores'. Ya nunca olvidarán el 16 de diciembre de 2015.

De inicio, apostó Neville por Zahibo, un futbolista más hecho. Con 21 años, el francés es fijo en el Mestalla. Un pulmón de físico imponente, figura que se ha puesto de moda en la última década dentro del fútbol europeo. Las ausencias de Javi Fuego y Enzo Pérez facilitaron la alineación de Zahibo. Y el marsellés jugó con toda la tranquilidad del mundo. Anclado en el mediocentro, se dedicó a surtir de balones sencillos a Parejo y André Gomes. Por arriba se le vio seguro y ayudó a los centrales en la poca faena acumulada.

Zahibo jugó los 90 minutos dando la talla. Fran Villalba se conformó con 46. Con la eliminatoria sentenciada, Neville dio paso al jugador de El Cabanyal y sentó a André. Menos presencia física, mismo estilo. Villalba, de sólo 17 años, eligió siempre la mejor opción. Mestalla recompensó las virtudes del que se muestra como un futbolista diferente. Tiene clase, como ya dejó claro en la pretemporada (aún a las órdenes de Nuno) y tiempo de sobra para crecer y formarse dentro de un vestuario repleto de juventud.

«Estaba tranquilo porque el entrenador me dio la confianza. Me dijo que actuara con tranquilidad. Sentí una gran emoción porque el público me apoyó y se lo agradezco. Ahora hay que seguir trabajando en el filial, que es mi equipo. Ojalá algún día fuera como Silva, cada uno tiene unas características», decía Villalba, uno de los jugadores a quien la grada más cuidó, como también a Diallo, otro central de buena presencia.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios